El duelo desautorizado también conocido como duelo prohibido, es bastante difícil de afrontar. Actualmente muchas personas lo padecen, así como sus graves secuelas. Desde Collyfer vamos a tratar sobre como afrontarlo y ayudar a quien pasa por ello.
Quienes atraviesan una situación de duelo y no se permiten o no les permiten expresar sus sentimientos al respecto experimentan lo que se conoce como duelo desautorizado. Esa prohibición o imposición puede ser ejercida por la propia persona o por un agente externo: otro familiar, una institución, la fuerza coercitiva de la presión social, etc.
De hecho, aunque pueda parecer extraño, suele ser la propia persona la que se somete a ese duelo desautorizado. Quizás porque se niega a aceptar los hechos, porque no se permite albergar ciertos sentimientos, porque se avergüenza de ellos… Sea como sea, se trata de una represión del sufrimiento suscitada por un problema interno y particular de gestión emocional.
¿Cómo ayudar a alguien ante un duelo prohibido?
Expresar los sentimientos que nos ahogan, aunque sean contradictorios o creamos que no son adecuados en un momento concreto, ayuda a sobrellevar una situación que requiere de un largo proceso de interiorización y aceptación. Seguramente, como ocurre con pacientes, víctimas, etc., lo que no necesita una persona que atraviesa un duelo desautorizado es que alguien intente quitarle hierro al asunto para animarla o que intente minimizar el problema.