Los múltiples beneficios que aportan las mascotas a sus dueños son un hecho más que probado. Pero hay un aspecto que tal vez no sea tenido muy en cuenta. Se trata de la ayuda que nuestros animales de compañía pueden facilitarnos a la hora de enfrentarnos a la muerte o al dolor por la pérdida de un ser querido. Hoy en Collyfer vamos a explorar más este aspecto, ¿quieres unirte a nosotros?
La tranquilidad y sosiego que pueden aportarnos nuestros peludos amigos en unos momentos tan duros es bastante, ya que logran mitigar las alteraciones psicológicas derivadas del proceso de duelo. Nos aportan su amor incondicional, compañerismo y apoyo emocional, y curiosamente de manera instintiva saben cómo responder en momentos de estrés, ayudando en la búsqueda de la conservación de la vida y la lucha por seguir construyendo el día a día.
Y es que las mascotas tienen la habilidad natural de intuir la necesidad que sus dueños tienen de compañía y apoyo, reduciendo la sensación de soledad e incrementando el sentimiento de intimidad, y por ello magnifican los gestos de cariño hacia él. A su lado nos evadimos de nuestros pensamientos, aumentando la autoestima del abatido y el sentido de responsabilidad. La falta de deseo de relacionarse de una persona en tránsito de duelo topa con las necesidades de su mascota: darle de comer o beber, sacarle a la calle, jugar… e incluso en ausencia de humanos se cuenta a la mascota los problemas, sirviendo como vía de escape al trance que se atraviesa.